Semana Santa en Yuste[COMPLETO]

Situado en las estribaciones de la Sierra de Gredos, combinando la montaña con la vegetación, se encuentra la Granja de Yuste, declarada Interés Turístico Nacional. Dormir en una cabaña celta, hacer piragüismo, lanzarte en tirolina… ¡Combina experiencias únicas mientras te dejas cautivar por la belleza del valle de la Vera! Disfrutarás de una escapada pensión completa y barra libre incluida para que sólo te preocupes de disfrutar. ¿Te lo vas a perder? 

Las actividades se realizan a partir de siguiente día de llegada, a razón de dos por la mañana y dos por la tarde, 6 horas total, ultimo día ½ día de senderismo. Las actividades y la rotación de las mismas serán escogidas por los miembros de la instalación a la llegada cuando se realicen la formación de los grupos, las actividades pueden ser: piragüismo dentro de las instalaciones, tirolina de 80 m, puente tibetano, escalada en rocódromo, rappel, tiro con arco y yincana de orientación y senderismo. Las actividades son recomendadas para niños mayores de 8 años y adultos hasta 60 años.

Día 1: Llegada y bienvenida Tras el viaje hasta La Aldea de Yuste, llega el momento de instalarse en las acogedoras cabañas celtas, un lugar muy especial para conectar con la naturaleza desde el primer instante. El personal de la instalación da la bienvenida a todos, explica el funcionamiento del complejo y facilita los detalles generales del programa. Después de la comida, habrá una reunión inicial donde se forman los grupos de aventura y se eligen, entre todos, las actividades que cada grupo desarrollará a lo largo de la estancia. Después de la cena, la animación nocturna ofrece un ambiente perfecto para conocer a las demás familias y disfrutar de la primera noche en este entorno único.

Día 2: Aventura en la mañana y en la tarde El segundo día se dedica plenamente a las actividades de multiaventura. Por la mañana, se pueden combinar dos propuestas diferentes, como iniciarse en tiro con arco y lanzarse por la tirolina de 80 metros, una experiencia que pone a prueba la adrenalina y la capacidad de superación. Tras la comida, la tarde continúa con otras dos actividades, por ejemplo piragüismo en un entorno seguro dentro de las instalaciones, seguido de cruzar el puente tibetano. Entre risas, compañerismo y emoción, los niños y los adultos disfrutan de un día muy completo, mientras los monitores se aseguran de la máxima seguridad. Al anochecer, es buen momento para relajarse, pasear por la finca o participar en la animación pensada para que pequeños y mayores se diviertan por igual.

Día 3: Escalada, rappel y algo más La mañana del tercer día puede centrarse en la aventura vertical: la escalada en rocódromo, apta para principiantes, y el rápel, que se convierte en el complemento perfecto de la escalada. Los monitores enseñan las técnicas básicas para ascender y descender, fomentando la confianza en uno mismo y la colaboración en familia. Por la tarde, una yincana de orientación es una gran opción para desarrollar el sentido de la orientación y el trabajo en equipo, buscando hitos con ayuda de mapas y brújulas. O, si lo prefiere el grupo, se puede repetir alguna actividad estrella del día anterior. Al final de la jornada, siempre hay espacio para compartir anécdotas con los nuevos amigos y disfrutar de la animación nocturna.

Día 4: Senderismo y despedida Despues del desayuno podréis hacer una tranquila ruta de senderismo, perfecta para admirar el entorno natural de La Aldea de Yuste y disfrutar del aire libre antes de recoger el equipaje. Es un momento ideal para tomar fotografías, compartir los últimos momentos en familia y hacer balance de la experiencia vivida. Quienes lo deseen pueden intercambiar contactos con las nuevas amistades, dando por finalizado un programa repleto de aventuras y de recuerdos inolvidables. Con las cabañas celtas como punto de partida, la experiencia #Viajacontuhijo en Semana Santa se convertirá en un tesoro de anécdotas que durará para siempre en la memoria de niños y adultos.

Las instalaciones se encuentran ubicadas en una finca privada de 1.000.000 m, dentro de un pinar de 3000 hectáreas y a unos 15 km del núcleo urbano más cercano. Los clientes solo pueden acceder en su trasporte privado, evitando las aglomeraciones del trasporte público. Estas condiciones suponen una muy baja densidad de población, suponiendo estas circunstancias un menor riesgo.